domingo, 19 de noviembre de 2017

Abogados Cristianos y tres piedras...



Resulta que hay una Asociación de Abogados Cristianos (me ahorro la rima), al principio pensaba que eran unos fieles seguidores de la estrella portuguesa del real Madrid, pero no, se refieren al cristianismo, a la religión que sigue la palabra de Cristo como Dios verdadero.

Después se me planteó al duda sobre que tipo de cristianos son, ¿serian ortodoxos, protestantes, episcopalianos, mormones, bautistas, cuáqueros, evangelistas, testigos de Jehová, coptos, católicos o seguidores de la iglesia de los Serenquenquenes del séptimo premio?...

Pues la duda no se me aclara, no sé quienes son sus asociados(lo que nos serviría para en base a las creencias de cada uno contratar o rechazar sus servicios). Lo cierto es que no especifican a que grupo de cristianos se refieren, y aún así se  arrogan la representación de tan amplia diferencia de interpretaciones de una religión.

Deduzco que deben ser católicos, ya que solo con este colectivo se entendería que en un país cuya constitución no permite diferencias entre razas, sexo o religión se tolere una asociación de juristas que distingue en función de creencias (sería entendible si fueran por ejemplo, peluqueros) lo que les sitúa casi al borde de los límites de nuestro ordenamiento constitucional.

En otro momento me daría igual lo que son o dejan de ser, pero resulta que lo único que muestran de forma clara es que forman parte de los cristianos intolerantes, esos que no toleran el pensamiento contrario, esos que convierten cualquier manifestación sobre sus creencias en una ofensa  hacia ellos, y automáticamente activan los mecanismos de ataque del fundamentalismo.

Son un colectivo dado a la denuncia fácil, un ejemplo es la perreta en forma de cruzada emprendida contra el Drag Setlhas por su libre interpretación de la iconografía religiosa en la gala Drag de las fiestas del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria.

Su empeño en perseguir judicialmente la actuación del drag por una supuesta falta contra la libertad religiosa, por la cual "se sienten profundamente ofendidos", choca frontalmente con su pasividad frente a las barbaridades manifestadas por miembros de la conferencia Episcopal en relación a temas tan importantes para nuestra sociedad como: los derechos de los homosexuales, la mujer o los abusos sexuales a niños dentro de la iglesia a la cual defienden.

Para mi esto tiene poco recorrido si lo afrontamos desde las propias creencias que defienden. O eres un buen cristiano, abogado o no, y cumples a rajatabla los mandamientos de tu Dios en todas las ocasiones o eres un falso y tus creencias son una excusa, ya que ni tu mismo las sigues (supongo por ejemplo, que no habrá ningún divorciado, homosexual o pareja de hecho dentro de esta asociación ya que invalidaría sus acciones).

Si nos ceñimos a la biblia, el propio Jesús dejaba claro cual es la postura que debe seguir un buen cristiano ante quienes les ofenden (y esto no contempla las demandas judiciales) por si se les ha olvidado la palabra de su Dios, aquí se la recuerdo:

Jesús dijo en Mateo 6:14-15, “Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.”